domingo, 18 de diciembre de 2011

Capítulo 12

Por suerte todo fue tomando color. La imagen se hacía cada vez más real: un bosque. Estaba en un bosque? Pero no era uno común, los árboles eran extraños. Había un camino de tierra. Allí también reinaba el silencio, era abrumador. 















Sobre los pies de uno de aquellos inmensos árboles, se encontraba un muchacho. Me parecía haberlo visto alguna vez. Decidí acercarme, pero en ese momento algo pasó volando sobre mí. No era un pájaro común y corriente. Tenía colores tales como los del fuego. Y en lugar de su pico, había una trompeta, que sonaba como una de estas. Que extraño era aquello! Seguí caminando, y allí estaba el muchacho. Observándolo mejor, se parecía a mi, no comprendía por que. Hasta que me di cuenta que sobre mis manos, aún estaba ese extraño objeto. Por esa razón comencé a recordar: La habitación, el tío Alfred, la máquina del tiempo y... Félix! Si, ese era Félix. Me acerqué corriendo.
-Félix!-Dije emocionada. Él observó a su al rededor, como si no entendiera por qué razón le hablaba a él.
-Me hablas a mi?-Preguntó.
-Si!-Contesté y comprendí que ese extraño lugar era como que hacía que te olvidaras de las cosas, incluso de tu nombre. Es que había algo allí que era muy extraño.- Te llamas Félix, y yo soy tu hermana Angie.
-Qué?-Preguntó desconcertado. Pero hizo un gesto como recordando.- Tienes razón, pero por qué estamos aquí?
-Recuerdas esto, y al tío Alfred?- Dije enseñándole la máquina.
-Si!-Dijo ahora.- Y como salimos de aquí?
-No sé.- Respondí.
Ambos observamos el lugar unos minutos.
-A donde llevará ese camino?-Preguntó ahora.
-No lo sé.- Contesté.
-Vamos!-Dijo y comenzó a caminar siguiéndolo.
Caminamos horas y horas, no parecía haber vida en ese lugar. El único ruido que se oía eran nuestros pasos. No podíamos saber con certeza si era de noche o de día, ya que los árboles eran tan altos y frondosos que no se podía observar el cielo. Pero de pronto estos comenzaron a ser diferentes. Ya no tenían el mismo color, y la misma forma. Cuando más lejos caminábamos, eran más extraños. Había luces en ellos, marcos de cuadros en el suelo, por cierto, este era de un color extraño, y lo más llamativo era que había enormes manzanas sobre él. No era extraño en el sentido de algo horrible, ni mucho menos, era una de las cosas más hermosas que había visto en mi vida. 




Pero,algo era aún más extraño. Un árbol contenía una puerta. 
-Vamos?-Preguntó Félix.
-Creo que es la única salida.- Contesté.
Félix abrió la puerta lentamente, y entramos allí. Fue exactamente la misma sensación que al tocar la máquina. Todo era blanco, no había aire, ruido, ni siquiera suelo. Hacía olvidarte de todas las tristezas y crueldades del mundo, en un solo segundo de confusión. Y, eso era lo que duraba, un segundo. Luego, todo comenzaba a tomar color y  realismo. Era Londres. Pero no era igual que al irnos, tenía un aspecto más antiguo. A medida que nos acercábamos más a la realidad, podía notarse en las calles, con los autos y la vestimenta de la gente, que estábamos, por lo menos 50 años atrás...

5 comentarios:

  1. haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!! ya estan en londres!! *____* espero el prox cap!!!

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  2. eyy gracias por pasarte por mi fic! ya empeze a leer el tuyo y me gusta!

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  3. :D Sin palabras! Es perfecto wiiii
    Paso al otro capituloooo! 6_9

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  4. AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA YA REGRESARON EN EL TIEMPO! AY! QUE BONITOS ÁRBOLES!otra pregunta, ya en serio ¿qué consumes para ver esas cosas? jajajajaja es bromaa (pero yo quiero)

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